LA MISMA PELICULA

Ya son seis las jornadas que llevamos disputadas en el grupo IV de la Segunda División B del fútbol español. La película se repite un año más. El Granada CF no acaba de enganchar a los aficionados en este nuevo inicio de curso. Equilibrio total en cuanto a resultados, pero no así en el juego desarrollado por la plantilla rojiblanca. Dos son las victorias, dos los empates y dos las derrotas. Es pronto, por supuesto, pero esta afirmación se viene repitiendo los últimos años y al final se ha acabado demostrando que lo que mal empieza mal acaba.

No soy el mejor posicionado para escudriñar el juego de los de Oscar Cano, aunque las experiencias pasadas me han enseñado que aunque los resultados lleguen más tarde, el juego está muy distante de lo que a casi todos nos gustaría y eso es una circunstancia que refleja fielmente lo que el futuro nos depara. Ya se que en esta categoría no existe el “yogo bonito” ni yo me estoy refiriendo a él. El equipo no transmite la solidez y eficacia necesaria como para despertar el optimismo entre su hinchada. No estoy diciendo que si aplastáramos a nuestros rivales, tendríamos el ascenso asegurado, pero esto es como la lotería y cuantos más números se obtengan, más posibilidades hay de éxito. Luego, el agraciado es uno entre miles, que a priori, partía con las mismas papeletas que los demás. Al equipo rojiblanco le falta algo, no sé, para eso ya están los profesionales, pero es evidente que la maquinaria granadina, no termina de estar todo lo engrasada y definida como en un principio parecía. El mister cumple su segundo año y a estas alturas debería de tener mejor trabajada a la escuadra de Los Cármenes. Al final de la pasada temporada, parecía haber encontrado la fórmula secreta y ahora, parece partir de cero nuevamente. Ni se es sólido atrás, ni se resuelve delante. No hay Gorkadependencia, ya, ni tan siquiera eso tenemos.

Todo es posible y puede que al final se cumpla el objetivo, que es lo más importante. No queda muy lejos la última temporada que el equipo de Recogidas estuvo en Tercera y tras un devenir un tanto dubitativo por aquellos campos de dios, con derrotas sonrojantes, finalmente se consiguió acabar primeros y materializar el deseado ascenso a la categoría que hoy atesoramos. Aun así, a día de hoy, el juego desplegado por los pupilos de Cano, no augura grandes celebraciones a final del Campeonato.

Los resultados pueden cambiar, el fútbol es así, pero estos llegan más fácilmente si hay buenos argumentos para conseguirlos. No podemos estar esperando que cada año se nos aparezca la Virgen en la recta final de la competición regular. Visto lo visto, nos podemos ir preparando para que este año la Fuente de las Batallas no reciba nuestra visita.

Ojala me equivoque pero llevamos tres años con la misma esperanza y los milagros, casi nunca suceden. Espero poder sobrellevar los palos que me puedan dar por este artículo, si finalmente el equipo subiera, pero les aseguro que con la escuadra rojiblanca en la liga “Adelante” los palos dolerían muchísimo menos. Nunca una equivocación sabría tan bien.