... Y ESPAÑA GANÓ LA DAVIS

Puede que sea el momento, pero no es el lugar más indicado para tratar la proeza conseguida por Verdasco y compañía. Pero es que se le quitan a uno las ganas de, ni tan siquiera, pensar en otra cosa. Un amigo, compañero en el foro oficial de las peñas del Granada CF, decía que la hazaña tenística, había sido la única alegría de la semana. No le falta razón, aunque para quienes también amamos el deporte de la canasta, los hombres de Trifón Poch, este fin de semana, si nos han mostrado su cara más competitiva, derrotando con seriedad a Fuenlabrada. Aunque la trayectoria del Cebé también merece un análisis mas detallado, mas allá del triunfo obtenido ante los madrileños. No es comprensible que el conjunto del Zaidín, se muestre tan distinto en sus partidos de casa y en los que actúa como visitante. Este pasado domingo, bastó con no cometer los errores de patio de colegio, que provocan perdidas tontas y ataques alocados. Hasta Jasen tuvo su oportunidad de reivindicarse. La apuesta de Poch de incluirlo en el quinteto inicial, era arriesgada, pero no salió del todo mal. El argentino se mostró cauto y prudente en ataque y feroz en defensa. Ese es el papel que debe de desempeñar este jugador en el cebé. Carlos Cherry estuvo sobrio, no tiene la electricidad de Gianella, pero cumplió con creces su cometido. Nacho Martín demostró que si tiene minutos, puede ir a más, sobre todo en la posición de tres. Maric, es como los famosos bombones de la tele, “nos ha conquistado a todos”. Bromas aparte, preocupa la falta de puntería de Hunter y la poca participación de Videnov.
En el primer cuarto, los granadinos, salieron a pista como si la historia no fuera con ellos. Sobre todo en ataque, daban la sensación como si esperaran que alguien les resolviera las jugadas ofensivas. Tardaron diez minutos en darse cuenta de que Nico no estaba en cancha y Scepanovic ni siquiera se había vestido. Por suerte, el “Fuenla” tampoco estuvo muy allá y al termino de este periodo se llegó con un paupérrimo (mejor esta palabra que pírrico) resultado de 9 a 13. Los nazaríes no sufrieron su típica pájara en ningún momento del choque. Bueno, en realidad si que hubo un amago de descalabro, pero este se produjo en la recta final del encuentro y tras lograr los locales una renta de 16 puntos, que dejó finiquitado el partido antes de hora. A Trifón le salió bien la jugada de sacar de inicio a Jasen y de esta manera recuperar a un jugador, que empezaba a estar en entredicho por los propios aficionados granadinos. En definitiva, que lo que uno no puede llegar a entender, es como estos chicos, no dan la talla en las salidas por las distintas canchas por las que circula la ACB. Si es que saca de sus casillas a cualquiera. Lo realizado por los rojiverde esta jornada, no es espectacularidad, no fue un juego arrollador, no se tuvo un día esplendido en el juego exterior, pero si que fue necesaria mucha dosis de seriedad, cordura, menos rotaciones, concentración todo el partido y saber cada uno lo que tiene que aportar, sin alardes innecesarios ni protagonismos infructuosos. ¡Ah!, que no se me olvide… y sobre todo, lo que si fue imprescindible, fue Curtis Borchardt. ¿A ver por que narices no se juega igual lejos del Palacio de los Deportes?
Pero si hay algún equipo que esta temporada nos deje más chafados que nunca, sin ilusión, casi ni por seguir los resultados que jornada a jornada atesora, tristes, cabizbajos y alicaídos, este no es otro que el Granada CF. Ya no le quedan ganas a uno, ni de buscar las causas por las que el equipo rojiblanco va de mal en peor. Ya sabemos que esto es una simple cuestión de resultados, pero semana tras semana, nos llevamos un varapalo, cada vez mas difícil de sobrellevar. Menos mal que al menos, España, ganó la Copa Davis, aunque a muchos ni tan siquiera eso les consuela. De peores habéis salido chicos, ánimo y para adelante.